En el CICC se realizan los análisis y ensayos que permiten verificar la adecuación de los productos a las reglamentaciones y normas, determinar sus características y comprobar la veracidad de las atribuciones declaradas en el etiquetado. Además, se lleva a cabo una importante labor de investigación para la puesta a punto y la validación de métodos eficaces de análisis. Dichos análisis se realizan a petición de los distintos organismos de las Administraciones Públicas.
Para el desarrollo de su actividad, el Centro está dotado de un Instrumental muy avanzado y un personal altamente cualificado. En este sentido, cabe destacar la presencia multidisciplinar de técnicos superiores con titulaciones muy específicas: farmacéuticos, químicos, biólogos, físicos, ingenieros, etc. Todos ellos posibilitan, no sólo el control de los productos de consumo, sino la investigación necesaria para la puesta a punto de las nuevas técnicas y ensayos analíticos. Quizás lo más sorprendente sea la gran variedad de artículos, productos o matrices que se analizan en el Centro, que abarcan desde cualquier tipo de producto alimenticio hasta los distintos productos industriales de consumo que podemos encontrar en los comercios.
En el caso de productos industriales, o mejor dicho, productos no alimenticios, se reciben una media que oscila entre 3000 y 4000 muestras al año que van desde artículos para el ocio y el deporte (cuerdas de montaña, balones, juguetes en general) hasta material de puericultura, utensilios de cocina, artículos de limpieza, gasóleos y gasolinas, cosméticos, zapatos, ropa de cama, vestidos, material eléctrico, electrodomésticos, luminarias, herramientas, joyas, monedas, bisutería, etc. En lo que respecta a los productos alimenticios, con aproximadamente el mismo número de muestras analizadas por año, se reciben también una gran variedad de muestras: bebidas (aguas, zumos, vinos..), aceites, condimentos y especias, harinas, café y otros estimulantes, productos cárnicos, pescados, conservas, y un largo etc. Toda esta actividad analítica conlleva la realización de una media aproximada de 75000 determinaciones al año.
Los análisis de las muestras que llegan al CICC se realizan exclusivamente a petición de los diversos organismos de la administración pública con responsabilidad en la protección de las personas consumidoras y normalmente son remitidas desde:
- Servicios de Inspección de las Comunidades Autónomas con competencias en Consumo.
- Ayuntamientos y Oficinas Municipales de Información a la Persona Consumidora (OMIC).
- Juntas Arbitrales.
- Juzgados.
- Otros organismos de la Administración.
Si una vez analizada la muestra se constata que hay un incumplimiento en la legislación a aplicar, el Centro informa al organismo oficial que ha tomado la muestra de la irregularidad detectada mediante la emisión de un Informe de Ensayos, para que éste tome las medidas apropiadas.
Por otra parte si las muestras analizadas corresponden a productos no alimenticios cabe destacar que en caso de que el análisis de alguna de ellas determine un incumplimiento en relación con la seguridad, cuya evaluación de riesgo implique riesgo grave, la muestra pasa a formar parte de la red de alerta RAPEX. En este sentido el CICC es parte activa en la aplicación del Real Decreto 1801/2003 sobre la Seguridad General de los Productos.
Los técnicos del CICC participan en diferentes grupos de expertos, tanto de normalización como de métodos analíticos propios de los productos que analizan: Grupos de expertos de la Unión Europea, AENOR, CIOA, Grupo de Contaminantes de AECOSAN, FIL, CEN, PROSAFE, etc.